Jardín de los Adarves

¡Pssst! ¡Tú! Si tú. Baja la voz. Desvíate un minuto. ¡Un minuto apenas! Confúndete en este Jardín de los Adarves y podrás llevar contigo un mensaje secreto para un caballero de la familia de los Aben-cerrajes… A cambio de tu merced, te contaré el origen de estos tranquilos jardines. Paseemos juntos.

El parapeto sobre una muralla se llama precisamente Adarve. Este donde estamos se construyó para emplazar cañones a mediados del siglo XVI, mucho después de la conquista cristiana de Granada. Cuando en 1609 fueron expulsados los moriscos, que conservaban la cultura árabe de sus antepasados aunque no tenían como religión el islam, el peligro de que se rebelaran contra el rey desapareció con ellos, y toda esta zona de la muralla perdió su finalidad defensiva.

En torno a 1628 se levantó este Jardín de los Adarves. En las dos fuentes que hay adosadas a las murallas puedes reconocer los rasgos neoclásicos propios de la época. En cambio, la fuente circular de alabastro, en el centro del jardín, pertenece al más puro periodo nazarí. Su emplazamiento original había caído en el olvido, por lo que durante siglos fue puesta erróneamente sobre la fuente de los Leones, que pronto visitarás.

Ahora escúchame, por caridad… Soy una noble musulmana, enamorada de una apuesto caballero abencerraje. Aunque unos dicen que soy Moraima, reina de Granada y esposa de Boabdil. Pero no. No preguntes mi nombre, ni el de mi amado caballero... Los cristianos están a punto de tomar Granada y sé que a él lo encontrarás en algún lugar de los palacios nazaríes. ¿Le harás llegar un mensaje de mi parte? Ruégale que nos encontremos en el Generalife, la residencia de verano de los sultanes. Dile que bajo un árbol del jardín esperaré hasta poder verle de nuevo.

Gracias, mi desconocido amigo...



(c) (R) 2013, MUSMon com S.L.
Text (a) Carlos Madrid (2012)

Picture:
Source: Own work
Author: Julián Hernández Martínez (2013)